Tu lugar en el mundo

Hace dos semanas que no posteo. Uno de los motivos fue la cantidad de trabajo, TPs de la facultad, viajes, etc, pero otro, y no menos importante, tiene que ver con el análisis que vine haciendo sobre la temática de este post.

Hace un tiempo, uno de mis mejores amigos me comentó que el año que viene se va a ir a vivir afuera, lo cual me produjo tres reacciones:
1) Felicidad por su posibilidad de progresar y de buscar una mejor calidad de vida
2) Tristeza por perder el contacto diario con uno de mis mejores amigos, con lo mucho que escasean en estos días
3) Empecé a analizar de manera un poco mas objetiva este tipo de situaciones y movimientos migratorios

No es la primera persona en mi vida que se muda lejos, y ya aprendí a mantener cierto contacto constante a pesar de las distancias. El mundo actual y sus herramientas nos permiten estar al día y conversar a diario a diferencia de lo que ocurría antaño.

El mundo globalizado en el que vivimos tiene ventajas y desventajas. Entre las primeras nos abre un mundo de posibilidades, permitiéndonos observar nuevos mercados para nuestra habilidades, y entablar nuevas relaciones, así como también, si uno se empeña, nos deja trasladarnos en busca de un mejor pasar, o nuevas oportunidades. Sin embargo, entre las contras, también nos trae nueva competencia (ahora competimos contra el mundo, no solo contra nuestra sociedad inmediata), y al hacer tan fácil la migración uno pierde los afectos y el concepto de hogar.

Esto no quiere decir que esté a favor ni en contra de una postura u otra. Creo que el hogar uno termina construyéndolo donde el corazón lo dicte. Pero también creo que en algunos casos esa facilidad para cambiar de aires nos juega en contra porque nos da una salida sencilla (no es el caso de mi amigo, por las dudas...) ante la dificultad que nos plantea a veces nuestra sociedad actual. No es la primera vez que me he planteado la posibilidad de intentar crecer en otros mercados, pero finalmente, después de analizarlo una y otra vez, termino convenciéndome de que los palos en la rueda que uno recibe día a día nos preparan para lo peor, haciendo el día de mañana mas sencillo alcanzar el éxito en otros tableros de juego, con reglas claras y respeto por el resto de los jugadores.

No son decisiones fáciles, y siempre dependen de muchos factores, que incluyen a quienes amamos y de nuestra propia capacidad para desprendernos de nuestras ataduras. Pero alcanzar el éxito en nuestros emprendimientos en situaciones adversas nos enseña el manejo de infinidad de riesgos y variables que no en cualquier escuela de negocios se puede aprender.

Lamentablemente, todos los inconvenientes planteados desde lo económico, el crecimiento, la corrupción y el no respeto de la propiedad privada hicieron que infinidad de capacidad intelectual haya buscado mejores rumbos, enriqueciendo otras sociedades, a la vez empeorando las causas que generan esta emigración.

Sin embargo, aún con este análisis, creo que uno se queda corto en las causas y consecuencias que ocasionan este movimiento y solo queda esperar que aquellos que se van a ganar experiencia decidan volver, renovando la fe en que el rumbo se puede torcer, aunque sea aportando un pequeño granito de arena.