Zona de confort
Si bien el título no tiene que ver con algún producto especialmente diseñado para la higiene femenina o masculina, el análisis de esta semana comenzó por un desafío relacionado al tema.
Como muchos de los lectores sabrán, en mi CV figuran una tecnicatura en electrónica, una licenciatura en ciencias de la computación y dos posgrados (uno en BI y otro en negocios). Tiempo atrás, comencé un emprendimiento con dos personas cuyos dominios de conocimiento están muy poco alineados a mis estudios como pueden serlo la creatividad artística y publicitaria y el marketing.
Para una persona cuya gran parte de su vida transcurre entre eventos binarios, y para el cual la mayoría de las actitudes y acciones pueden reducirse a estructuras algorítmicas de razonamiento, realizar reuniones creativas de brainstorming para apelar al lado pasional del ser humano en una campaña puede ser un desafío que lo descoloque seriamente en su modelo de pensamiento.
Esta semana, tuve la oportunidad de compartir con dos grandes personas y profesionales varias horas de creatividad para diseñar un concepto alrededor de un producto, estimulando una parte del cerebro en el cual se itera constantemente mediante la prueba y error hasta pegar en el punto que se activa ante una idea acertada. Salir de la zona de confort que uno mas domina por un lado lo hace sentirse inseguro respecto a las posibilidades de colaboración, pero por otro lado desarrolla una gimnasia de pensamiento que nos permite convertirnos en personas mas completas.
Nuestro pequeño complejo de dios al creer que por tener experiencia en un área tenemos la verdad absoluta es la misma que nos impide ver el bosque, y oxidarnos con el paso del tiempo por el mismo miedo a ser superados y no abrirnos a nuevas experiencias y aprendizajes. La prueba y el error es uno de los ejercicios mas importantes, aún cuando nos consideremos expertos en una materia. Nuestra zona de confort puede ser la misma que nos condene al olvido por no estar abiertos a retroalimentarnos de las acciones interdisciplinarias.
Les puedo asegurar, que mas allá del miedo a lo desconocido, las experiencias producto de acciones compartidas con áreas alejadas de la propia, nos dejan aprendizajes difíciles de equiparar por otros medios.
Les dejo un nuevo video de TED, pero por ahora solo tiene subtítulos en inglés.
Como muchos de los lectores sabrán, en mi CV figuran una tecnicatura en electrónica, una licenciatura en ciencias de la computación y dos posgrados (uno en BI y otro en negocios). Tiempo atrás, comencé un emprendimiento con dos personas cuyos dominios de conocimiento están muy poco alineados a mis estudios como pueden serlo la creatividad artística y publicitaria y el marketing.
Para una persona cuya gran parte de su vida transcurre entre eventos binarios, y para el cual la mayoría de las actitudes y acciones pueden reducirse a estructuras algorítmicas de razonamiento, realizar reuniones creativas de brainstorming para apelar al lado pasional del ser humano en una campaña puede ser un desafío que lo descoloque seriamente en su modelo de pensamiento.
Esta semana, tuve la oportunidad de compartir con dos grandes personas y profesionales varias horas de creatividad para diseñar un concepto alrededor de un producto, estimulando una parte del cerebro en el cual se itera constantemente mediante la prueba y error hasta pegar en el punto que se activa ante una idea acertada. Salir de la zona de confort que uno mas domina por un lado lo hace sentirse inseguro respecto a las posibilidades de colaboración, pero por otro lado desarrolla una gimnasia de pensamiento que nos permite convertirnos en personas mas completas.
Nuestro pequeño complejo de dios al creer que por tener experiencia en un área tenemos la verdad absoluta es la misma que nos impide ver el bosque, y oxidarnos con el paso del tiempo por el mismo miedo a ser superados y no abrirnos a nuevas experiencias y aprendizajes. La prueba y el error es uno de los ejercicios mas importantes, aún cuando nos consideremos expertos en una materia. Nuestra zona de confort puede ser la misma que nos condene al olvido por no estar abiertos a retroalimentarnos de las acciones interdisciplinarias.
Les puedo asegurar, que mas allá del miedo a lo desconocido, las experiencias producto de acciones compartidas con áreas alejadas de la propia, nos dejan aprendizajes difíciles de equiparar por otros medios.
Les dejo un nuevo video de TED, pero por ahora solo tiene subtítulos en inglés.
Comments
Post a Comment